Había puesto una foto nuestra que debe tener unos 35 años. Pese a que esa foto lleva encima de la tele de mi casa esos mismos años el verla de nuevo, a varios kilómetros de distancia de ella, hizo que un montón de recuerdos se despertaran.
Mi madre siempre ha dicho que nunca le han gustado las fotos. Cuando era pequeña mi abuela Encarnación estaba empeñada en retratarla continuamente y ella sale en todas las fotos de su niñez, peripuesta con gorro, abrigo nuevo , calcetines hasta la rodilla y llena de lágrimas y mocos. Yo siempre me imagino a mi abuela orgullosa de su "nena" y al fotógrafo cagándose en toda nuestra familia intentando que mi madre ,al menos, no se le escapara para conseguir hacer la foto en cuestión y sobre todo con los medios tan rudimentarios que tenían que tener en la época en la que hacer una sola foto sería un logro.
El que mi madre odiara las fotos se ve que no le hizo mella pues nosotras también hemos sido retratadas en estudio en nuestra niñez, cosa que vista la foto de la que os hablo , tampoco nos debía gustar mucho a mi hermana y a mi.
Esta foto siempre la he llamado la de las "jetas". Mi hermana y yo tenemos una cara de pocos amigos que nos ha dado mucho juego cada vez que recordamos el día que nos la hicieron, nuestros vestidos, siempre hechos con la misma tela pero nunca iguales que nos hacia "La Rosario" la modista , nuestras horquillas , mi "raro" pelo suelto pues mi madre nunca me dejaba llevarlo así y el estudio rudimentario del "Cañero" en la Calle Mayor de Tobarra.
Hoy , esa foto, ya no sólo me da risa por todo esto, ahora también, aun en blanco y negro, veo a Julia en mi cara ya que ella, cuando se enfada , pone la misma cara de moñiga que tengo yo en el retrato, y es curioso ver el impresionante parecido de mi hermana con sus hijas.
Ahora hacemos fotos cada segundo, de cada cosa, de cada momento. Ojala tuviera más fotos de mi niñez. Si a mi madre no se hubieran ocurrido estas sesiones no tendríamos prácticamente ninguna de nosotras juntas y hoy no estaría haciendo este post.
Esta foto es una parte de la historia de nuestras vidas que está más viva que nunca.
Una preciosa historia en blanco y negro Encarni, en el escaso tiempo que ha transcurrido en leerla, me he visto reflejada en el espejo de "Rosario" la modista...cuando mi madre me llevaba también a tomarme medida para confeccionarme algún vestido siempre de antiguas telas de mis primas mayores. Me ha producido una inmensa ternura y nostalgia recordar el cuarto en penumbra del "Cañero" y como no!! saber y conocer un poquito más de tu historia, muy semejante a casi todas las de aquella época... a pesar que tú eres mucho más joven.
ResponderEliminarQue tiempos aquellos!!! Gracias por transportarme un instante a mi lugar de origen.
Espero y deseo que pases unos maravillosos días navideños y que el calor de la Navidad nos haga a tod@s ser más conscientes y sensibles de las crudas realidades
que tenemos alrededor.
Felices Fiestas y Próspero Año Nuevo 2014
Un fuerte y cariñoso abrazo, Pilar
Ciertamente tenéis una cara de mala leche impresionante. Casi me muero de risa viéndola. Besos grandes.
ResponderEliminar¡Y me ha encantado el video! ¡Qué bien elegido! Como siempre.
ResponderEliminarQuerida paisana, efectivamente la foto no es para el cartel de "La alegría de la huerta" (gran zarzuela por cierto) pero tiene su punto de ternura y como bien dices, inmortaliza un momento compartido con tu hermana. Un beso grande y aunque supongo que nos correaremos, te deseo lo mejor para estas fiesta y el nuevo año, que seguro va a ir a MUUUUUUUUUUUUUUUUCHO MEJOR. Besos amiga
ResponderEliminarGracias por vuestro comentarios!!!
ResponderEliminarOs deseo lo mejor para estos días y para los que vengan detrás.
Un abrazo!